En la entrada anterior había escrito VERGUENZA, desde los testimonios que han ido dando cada una de las víctimas de la máxima expresión de poder que "argentinos" impusieron a otros ARGENTINOS. Esa muestra de poder venía desde tiempos lejanos, cuando el país era manejado por unos pocos ricos que hacían su riqueza explotando a la mayoría (perdón por la generalización, pero no tengo mucho espacio). Estos últimos (1976) se bajaron los pantalones ante estos poderosos e hicieron el trabajo sucio, y lo hicieron tan bien que diezmaron a toda una generación que pensó una Argentina mejor, pero.. claro esto jóvenes pensaban distinto a los sirvientes de turno. Entonces pasó lo que pasó, usaron sus armas, su número mayor, sus traidores, sus infiltrados, bah, usaron todas las estrategias mas viles que encontraban.
Sin embargo, la historia tiene esas cosas, que a veces se puede escrudiñar, y contar, y la vida tiene esas cosas, de que a veces los poderosos no pueden con todos, y algunos quedan, y esos son los que después cuentan, participan, y logran.
Este señor, que aparece en la imagen, con buen traje, y buena camisa, en Córdoba, en su juicio, se atrevió a decir:
El ex dictador Jorge Rafael Videla denunció ayer que se siente “intimidado” por la reaparición en público de la “agrupación terrorista Montoneros”, y extendió esa “preocupación” a lo que le pueda ocurrir a su familia que, dijo, no tiene custodia.
Videla pidió la palabra en el juicio que ventila el Tribunal Oral N° 1 de la ciudad de Córdoba para referirse a la nota publicada por La Voz del Interior el domingo pasado, donde se da cuenta de un acto de Montoneros al que asistieron ex miembros de la cúpula de esa organización, entre ellos Guillermo Martínez Agüero y Roberto Perdía. También participó de la reunión el director de Derechos Humanos de la Municipalidad de Córdoba, Luis Baronetto, lo que le dio pie a Videla para marcar como “contradictorio” que, al declarar como testigo en el juicio, el funcionario haya dicho que “no le comprenden las generales de la ley”. Baronetto fue uno de los presos de la UP1 junto a su esposa, Marta Juana González, quien fue asesinada en un “intento de fuga”.
Videla dijo que la reaparición de Montoneros es una “amenaza a la sociedad de reinstaurar la violencia como vía para lograr fines políticos”.( origen La Voz del Interior Virtual) (Esto es por las dudas Magnetto y Jornet se me enojen) o sea traducido al lenguaje del pueblo TENGO UN CAGAZO, hombre grande, custodiado, protegido, diferente a lo que el ordenaba con quienes apresaban en la oscuridad y golpeaban a ciegas, está intimidado, pobre, me dieron ganas de llorar.
Pero no sería justo sino pusiera la noticia que publico el mismo diario, y como lo dice el mismo señor Videla, con respecto a la reunión del grupo Montoneros.
Estuvieron en ese acto, que se hizo en la sede de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Roberto Cirilo Perdía, por aquellos años violentos miembro de la conducción nacional de Montoneros; Jorge Falcone, hermano de Claudia, sobreviviente de la recordada Noche de los Lápices, y Guillermo Martínez Agüero, quien participó de la trágica toma armada a La Calera, el 1° de julio de 1970.
Al dialogar con este diario, “Polo” Agüero ratificó lo que había manifestado a otro medio de prensa mendocino: “No hemos enterrado las armas”.
“Así es. No es el momento para las armas, lo cual no quiere decir que las armas no sean un elemento de poder. Defendemos la democracia y la justicia social, pero no queremos que los compañeros pasemos al olvido. No hemos enterrado las armas, pero creemos que es una opción para cuando las condiciones lo hagan necesario”, afirmó Agüero, quien es cuñado de otro fundador de Montoneros: Mario Eduardo Firmenich.
Tanto Agüero como Perdía reivindican a Firmenich como un “líder” y un “referente histórico” de Montoneros.
“Firmenich es una figura respetable”, dijo Perdía, sin aludir a los procesos judiciales que el ex jefe guerrillero logró eludir en la Argentina.
Reencuentros. Entre el centenar de asistentes al mitin se encontraba el secretario de Derechos Humanos de la Municipalidad de Córdoba, Luis Eduardo Baronetto.
El ingreso del público al salón tuvo como hecho distintivo los abrazos prolongados que se daban Perdía y Agüero con otros dirigentes locales, la mayoría “sesentones”, como si no se vieran desde hace años.
“(Rodolfo) Puiggrós decía que la lucha popular se basa en tres elementos concretos: ‘las masas, la ideología y las armas’”, graficó Agüero, y fue enfático al reivindicar “la justicia social, los principios originales del socialismo peronista y la lucha armada”. Aunque admitió que el tenor de las “armas” hoy genera “temor” en la sociedad.
Abal Medina murió el 7 de septiembre de 1970, al cabo de un enfrentamiento con militares que lo buscaban por el crimen del general Pedro Eugenio Aramburu (1° de junio de 1970). La fecha de la caída de Abal Medina fue instaurada luego por la organización como el “Día de los Montoneros”. Ese fue el motivo también para la reunión del viernes en ATE, que congregó a un centenar de personas.
40 años después. “Después de 40 años recordamos que Montoneros fue una gigante ilusión. Ilusión de justicia social y de independencia de soberanía aún no alcanzadas. Se están repitiendo viejos errores y se favorece el saqueo en materia petrolera, minera y en el sector antártico. Esa es la lucha del siglo 21 por una patria grande, que nuestros próceres de la Independencia no pudieron hacer”, señaló Perdía.
Y otra vez la pregunta sobre el tema de las armas que Montoneros supo blandir. Perdía la elude: “Creemos que esta democracia ha sido una gran conquista, pero los intereses populares no están representados, por la traición de los partidos políticos. Es poco lo que podemos esperar del sistema político”, lanzó.
Cree que es necesario “el avance de un proceso constituyente”, y apuntó: “Necesitamos un ‘argentinazo’ como en 1945 y como en de 2001”. Se refirió así a la fecha en que los peronistas le ofrendaron lealtad a Juan Perón y a la revuelta que terminó con la renuncia a la Presidencia de Fernando de la Rúa.
Tras el final de los años de plomo, se han escrito decenas de libros y artículos sobre la historia de Montoneros.
En una apretada síntesis sobre sus orígenes, se puede decir que Montoneros fue una organización guerrillera que se identificaba con la izquierda peronista y que desarrolló la lucha armada entre 1970 y 1979; aunque su poder se extendió hasta el golpe de Estado del 24 de marzo de 1976.
Si bien durante sus primeros años de militancia tuvo el apoyo de Juan Domingo Perón, a partir del 1° de mayo de 1974 sus métodos provocaron el rechazo del fundador del justicialismo (aquel días los trató de imberbes y los jóvenes se fueron de la Plaza de Mayo).
En la cúpula fundadora estaban Mario Firmenich, Roberto Perdía, Fernando Abal Medina, Emilio Maza, Norma Arrostito y Carlos Ramus.
Entre los hechos relevantes dentro de esta escalada de violencia, Montoneros asesinó al ex presidente de facto Pedro Eugenio Aramburu, el 1° de junio de 1970. Un mes después, la organización encaró el operativo de toma de la localidad cordobesa de La Calera, donde murió Maza. Sus objetivos fueron la lucha contra el proceso de facto que encabezó el general Juan Carlos Onganía en sus comienzos. También tenía como meta el retorno de Perón al poder. Si embargo, cuando en marzo de 1973 asumió la presidencia Héctor Cámpora (unos meses después lo sucedería Perón) Montoneros se enfrascó en una lucha armada para instaurar en el país un sistema político que denominaban “socialismo nacional”.
Se alineaban en el peronismo revolucionario, de neto perfil anti imperialista. Predominaba en el grupo una mezcla ideológica de la doctrina peronista, con elementos del marxismo latinoamericano y con influencias católicas desde el movimiento tercermundista.
Me he tomado el trabajo de resaltar las palabras y frases que el diario incluyó, así como al descuido, creo que cada uno debe sacar sus propias conclusiones, de eso se trata la democracia, pero lo que no puedo dejar de decir, es que en el párrafo en donde en tres líneas sintetizan diez años de historia, quien escribió la nota (periodista) no leyó ninguno de las decenas de libros que se escribió sobre Montoneros, por lo menos los mas serios, no los de Yofre, tratando de entender el verdadero contexto histórico en que sucedieron los hechos.
Pobre Señor Videla que tiene Miedo, ¿habrá tenido el mismo miedo cuando infiltro a Astiz para asesinar a mujeres indefensas?
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